Sobre unánimes

Miércoles, 8 de mayo de 2013

Fernando Savater

El comienzo del cuento Las ruinas circulares de J.L. Borges:

Nadie lo vio desembarcar en la unánime noche.

Esta es una de las oraciones más citadas de Borges; vista como un perfecto ejemplo de su fulgurante originalidad en el uso de adjetivos y adverbios.

Pero años después de escribir esa oración Borges desaprobó, con razón, el uso del adjetivo “unánime.” ¿Por qué? Creo que él mismo nos da la clave en un comentario que hizo sobre el verso de E.E. Cummings

God’s terrible face, brighter than a spoon

Sobre este verso Borges dijo en las conferencias Norton (en inglés):

I am rather sorry about the spoon, because of course one feels that he thought at first of a sword, or of a candle, or of the sun, or of a shield, or of something traditionally shining, and then he said, “No -after all, I’m modern, so I’ll work in a spoon.” And so he got his spoon.

Con el “unánime” ocurre lo mismo. En mi opinión el adjetivo no sirve en esa oración porque no tiene ningún sentido. ¿Cómo puede ser una noche unánime? Pero sin duda, en ese contexto, el “unánime” es exótico y original (moderno), y eso quizá atrajo inicialmente a Borges.

Algunos dirán que no todo debe tener un significado claro; que el significado a veces puede ser sacrificado por la sonoridad, etc. A mí eso no me convence en este caso, especialmente cuando contrasto la oración del cuento de Borges con el verso de Sonatina de Ruben Darío:

Los cisnes unánimes en el lago de azur

¿Por qué aquí “unánime” sí funciona? Por una razón simple, como explica Fernando Savater en su autobiografía:

Al principio la unanimidad de los cisnes sólo me resultó verbal, no evidente, porque ni siquiera estaba familiarizado con lo que significaba la palabra. Pero una tarde, en el minúsculo estanque de la plaza de Guipúzcoa que entonces albergaba varios cisnes, me detuve a verlos pasar deslizándose en paralelo sin agitar el agua. Y comprendí de pronto, con revelación fulgurante, que eran unánimes y sólo unánimes serían ya para siempre.

Fíjense, por cierto, que Savater dice que el verso transfiguró la realidad; la enriqueció. Asociar ese bello adjetivo a los cisnes deslizándose en paralelo hizo del espectáculo de esos animales algo aún más hermoso.

Eso hace el arte.

El jazz de Bellow

Martes, 7 de mayo de 2013

Mientras leo The Actual, estoy otra vez maravillado con el dinamismo de la prosa de Saul Bellow y, sobre todo, con la importancia del delivery.

Ya he citado esta frase de Herzog antes, pero vale la pena repetirla porque ilustra perfectamente lo que quiero decir:

Herzog’s mother had had a weakness for Jews with handsome beards. In her family, too, all the elders had beards that were thick and rich, full of religion.

La idea de una barba religiosa o una barba que uno asocia con la religión es buena. Porque, efectivamente, hay barbas con un tufo religioso. Pero el delivery de esta idea es tan importante como la idea misma. Imaginemos que Bellow hubiese escrito…

Herzog’s mother had had a weakness for Jews with handsome beards. In her family all the elders had thick, rich and religious beards.

El significado de esta oración es casi idéntico, pero el efecto que tiene en nosotros no es el mismo. El sentido de ritmo y la musicalidad de Bellow son esenciales para hacer brillar la idea de las barbas religiosas.

Fíjense, en la frase original, en el ritmo que añade el “too” entre las comas y los maravillosos acentos del “thick and rich.” Esto es casi música.

A veces un cigarro

Martes, 7 de mayo de 2013

En un artículo publicado por America’s Quarterly, Andy Baker y David Cupery hacen dos hallazgos interesantes sobre el antiamericanismo en América Latina.

(Cada vez que utilizo este término alguien se queja. Si alguien me propone algo más bonito que “antiestadounidismo” dejo de utilizar antiamericanismo).

En fin, el artículo revela que el país más antiestadounidense de América Latina, Argentina, está por debajo del promedio mundial. Repito, debajo del promedio:

El otro hallazgo sorprendente es que los países que más han padecido el intervencionismo militar de Estados Unidos son los que tienen una opinión más favorable de este país. ¿Por qué? Porque, según los autores, estos son los países que tiene más lazos económicos con el norte. El resentimiento histórico causado por estas intervenciones no pesa tanto como la economía.

Esto me recuerda a Samuel Huntington sacando conclusiones demasiado serias sobre una pita que, en un partido entre México y Estados Unidos en Los Ángeles, le dieron los mexicanos residentes de esta ciudad al equipo estadounidense.

Huntington veía en la pita una muestra de las profundas diferencias culturales y del lacerante resentimiento histórico que consumía el alma de los mexicanos en EEUU (exagero un poco, pero no mucho). Instintivamente, y sin base científica, yo veía sólo la rutinaria pita que le da la fanaticada de un equipo al equipo contrario.

Estás despedido

Domingo, 5 de mayo de 2013

Tenía un presentimiento de que la realidad es mucho peor de lo que se ha logrado filtrar a los medios. Y tenía razón, como lo demuestra un reportaje El Nacional sobre la cazería de brujas que se ha desatado en el sector público:

Entre el lunes 15 y el miércoles 17 de abril, jefes y directores de departamentos en alcaldías, gobernaciones, ministerios, institutos, empresas y bancos públicos convocaron a contratados, empleados fijos y funcionarios de carrera -a través de correos electrónicos, mensajes de texto y conversaciones de pasillo- para iniciar lo que se convertiría en una cacería contra todo sospechoso de militar en las filas opositoras o de no hacerlo con contundencia en el bando oficialista.

Sentados en torno a sus superiores, los trabajadores escucharon la pregunta de por quién habían votado una y otra vez, recibieron amenazas de despidos y acabaron envueltos en un canje: ganar puntos para aumentos y ascensos a cambio de descubrir y denunciar a los “traidores” y “saboteadores” que no sigan a pie juntillas las directrices del Partido Socialista Unido de Venezuela. Fotos publicadas en Facebook, comentarios en Twitter, ausencias acumuladas en marchas oficialistas y hasta críticas a las políticas gubernamentales soltadas en un almuerzo se convirtieron en municiones para ejecutar la purga de la burocracia estatal.

Lo que aprendió como canciller

Domingo, 6 de mayo de 2013

Difícil creer lo torpe que fue Nicolás Maduro arremetiendo contra el canciller peruano, Rafael Roncagliolo, por simplemente invocar al diálogo en Venezuela.

Para los que no saben Roncagliolo no se ha portado mal con Maduro. Al contrario, se metió en problemas en su país por aceptar rápidamente su muy dudosa victoria. Algunos diputados de la oposición peruana estaban hace días pidiendo una interpelación a Roncagliolo.

Pero hoy esos mismos diputados que pedían una interpelación expresaron su apoyo al canciller a raíz de la arremetida de Maduro. Hasta ahora la región ha dejado que Maduro haga lo que quiera dentro de Venezuela sin mayores quejas. Pero Maduro podría estar forzando a los gobiernos vecinos a asumir una actitud menos complaciente.

No soy aún tan optimista, por supuesto. Pero que se haya abierto esta posibilidad es una muestra de la torpeza de Maduro en el manejo de la política exterior. (No olvidemos que Maduro fue canciller más de seis años).

En fin, el Ilegítimo podría lograr lo que la oposición venezolana no ha podido lograr: sacar de su sopor a las democracias latinoamericanas y obligarlas a pronunciarse sobre lo que está ocurriendo en Venezuela.

Update: Al parecer Maduro reculó.