Shadow-Line

Lunes, 5 de septiembre de 2011

Sobre su novela The Shadow-Line, Joseph Conrad escribió: Primarily the aim of this piece of writing was the presentation of certain facts which certainly were associated with the change from youth, care-free and fervent, to the more self-conscious and more poignante period of maturer life.

“El objetivo principal de esta novela es la presentación de ciertos hechos asociados al cambio de la juventud, despreocupada y ferviente, a un período de la vida madura más cohibido y acerbo.”

Fíjense en estas dos obras, ambas en la Frick Collection en Nueva York.

La primera de Ingres, la Comtesse d’Haussonville. La falta de pasado en su expresión, la ausencia de ‘cicatrices del alma,’ la ligereza casi arrogante en la mirada, como si inconscientemente nos echara en cara su belleza y juventud. Esta bella joven todavía preserva intacta esa habilidad juvenil de mirar el futuro como un vasto horizonte donde todo es posible.

Al otro lado del “shadow-line” está el retrato de Sir Thomas More, obra maestra absoluta de Holbein. Su expresión es más compleja, ambigua. Por un lado la mirada fuerte, determinada, que no se arredra ante nada. Por el otro, cierta vulnerabilidad en su expresión, un casi imperceptible rictus de desilusión. Cierta cautela, escepticismo, ‘baggage’ (palabra envidiable del inglés), producto de la edad o los desencantos inextricables del paso del tiempo:

 


Más sobre este tema:

  • Podrido arte. Reflexión sobre La gran odalisca de Ingres.
email

Share