Las verdades de Revel

Martes, 22 de febrero de 2011

Jean-François Revel

Hace una semana, en una entrevista con José Vicente Rangel, Hugo Chávez explicó que la corrupción actual en Venezuela es producto de los antivalores del capitalismo.

Señaló también que su administración ha dado “pasos muy importantes en el orden institucional y en el orden político profundo” para combatir este flagelo, como el impulso del Poder Popular.

Difícil leer esta declaración sin pensar en las incisivas observaciones de Jean-François Revel sobre el discurso de los comunistas.

Si algo va bien (los supuestos avances en alfabetización, por ejemplo), el mérito siempre es de la revolución. Si algo va mal (el crimen, la corrupción, etc), la culpa es de los antivalores capitalistas que siguen corrompiendo a la población obstaculizando los avances revolucionarios.

Si las cosas siguen mal después de diez, doce, quince años, la explicación es muy simple: la revolución, a pesar de sus titánicos esfuerzos, no ha podido terminar de liquidar los antivalores capitalistas.

Hugo Chávez, pues, goza de la eternidad para triunfar, beneficio que no recibe sino él. En el caso de los pasados presidentes cinco años son más que suficiente. Y los que aspiran a gobernar no gozan siquiera de un sólo día para probar si pueden o no pueden hacer un mejor trabajo que el actual gobierno. Ellos representan a priori esos antivalores que, con tanto esfuerzo, la revolución está tratando de marginar.

Como dicen los gringos, you can’t lose!

email

Share