Desplazamientos tectónicos

Miércoles, 7 de noviembre de 2012

Matt Yglesias suelta un dato impactante de las elecciones de ayer en EEUU:

Barack Obama seems to have gotten a slightly smaller share of the white vote than Michael Dukakis got in 1988. Certainly within the margin of error. But he did much better overall, not only because the white share of the overall population is shrinking but because the GOP has become less popular with non-whites over the past quarter century.

Romney, en otras palabras, capturó el voto de una población que se hace cada vez menos relevante, mientras que Obama hizo lo contrario: capturó el voto de sectores cada vez más relevantes demográficamente, incluyendo el voto joven, el hispano, así como el de otras minorías. (Y el femenino).

Los demócratas han conformado una variopinta y diversa coalición para ganar elecciones que, con el tiempo, va a ser cada vez más difícil de derrotar. Como se ha dicho ya muchas veces, o el partido republicano se reforma o está condenado a seguir perdiendo elecciones.

Y esta presión para reformarse, ¿a quién beneficia? A los hispanos, por supuesto. Cualquier proceso de reforma pasa por una profunda revisión de sus intransigentes posiciones inmigratorias.

Bajo esta perspectiva la ley de Arizona puede ser vista como uno de los últimos estertores de una visión retrógrada que está siendo arrasada por poderosas tendencias demográficas, de las cuales, por cierto, yo soy una pequeña parte.

email

Share