Jueves, 5 de agosto de 2010
Ayer fue una conferencia de prensa de Enrique Mendoza. Anteayer fue una del diputado de Podemos, Ismael García. Un día antes fue una del dirigente de Primero Justicia, Ramón Muchacho. La semana pasada les tocó turno -en días distintos- a Ramón Guillermo Aveledo, Juan José Molina, Leopoldo López, Carlos Vecchio, Henry Ramos.
Con evidente coordinación y disciplina, estos dirigentes de diferentes partidos -Primero Justicia, Podemos, Voluntad Popular, AD- se han encargado de que el escándalo de los alimentos no sea desplazado en el volatil ciclo de noticias venezolano.
El gobierno ha ayudado, pues todos los días surgen nuevos detalles de Pudreval, pero la Alternativa Democrática, por primera vez, está dictando su propia agenda electoral -y no simplemente bailando al son de la música del presidente Chávez.
¿Es bueno enfocarse tanto en Pudreval? ¿No sería más sabio enfocarse en el crimen o la economía?
Estas preguntas son válidas y se deben debatir. Pero creo que los fundamentos de la estrategia mediática opositora son acertados: enfocarse sólo en unos cuantos temas y no dejar que Chávez atomice el mensaje opositor ni determine el tema de conversación.
Este norte no se debe perder.
Otros textos del autor:
- Lea la última Tribuna Los secretos de la valija.
Share
Pingback: Chacumbele ataca | Alejandro Tarre