Ideas para la MUD

Jueves, 16 de diciembre de 2010

¿Cómo reaccionar ante esta emboscada totalitaria que Hugo Chávez, siempre inmoral pero también siempre sagaz, preparó justo para las navidades, cuando la oposición organizada tiene, por razones obvias, menos capacidad de movilizar a su gente?

No habiendo Estado de Derecho en Venezuela, la MUD sólo tiene un camino: llevar a cabo acciones para ejercer presión sobre el gobierno.

¿Que el gobierno igual no va a retroceder?

La pregunta importante no es esta. La pregunta importante es ¿qué otra opción tenemos para combatir esta última emboscada? Entre tomar las armas y quedarse quietos, yo creo que la mejor opción es buscar mecanismos originales de presión.

Algunas ideas:

1) Manifestaciones simultáneas. Elegir un día para realizar manifestaciones simultáneas en varios estados del país, al menos los que están gobernados por la oposición. La de Caracas, por supuesto, es importante, porque ya sabemos que la cercanía física a la adversidad es lo que más asusta a Chávez. De lo contrario, no hubiese priorizado a Caracas por encima del resto del país cuando los apagones; o dejaría que la gente marchara cerca de Miraflores.

La simultaneidad de las protestas tiene un valor simbólico importante, pues quizá resonaría más en la prensa mundial, lo cual podría provocar pronunciamientos más fuertes y seguidos por parte de otros gobiernos y mayor consciencia de lo que ocurre entre activistas defensores de los derechos humanos.

La empresas privadas, por cierto, deberían contribuir a financiar estas marchas. El riesgo que corren financiando a la oposición no es mayor al que corren dejando que Chávez siga demoliendo las estructuras democráticas del país.

2) Enmarcar la controversia de la habilitante en términos que reflejen la realidad. Para mucha gente (fuera y dentro de Venezuela) la habilitante es algo muy abstracto, que no expresa el grado de abuso de la medida del gobierno. Se debe comenzar a hablar de un desconocimiento de la voluntad popular, o de una disolución del nuevo Congreso.

3) No soltar el tema. Así como la oposición no soltó el tema de Pudreval y el crimen durante la pasada campaña electoral, todos los días ideando una manera de mantener estos asuntos en la palestra pública, la oposición se debe enfocar en este tema obsesivamente, durante las próximas semanas.

4) Presión internacional.  Ya la MUD está solicitando una reunión con Insulza. Y ya la CIDH emitió un comunicado protestando las medidas de Chávez. Pero se puede hacer más. Hay varias organizaciones que han sido muy solidarias con Venezuela, algunas de las cuales ya se han pronunciado, que no apoyan las nuevas medidas del gobierno. La SIP, el CPJ, AIR, Reporteros sin Fronteras -estas y otras organizaciones deberían formar un frente común para protestar las medidas contra los medios. La MUD debería proponer la idea de un comunicado conjunto de todas las organizaciones que ya se han pronunciado.

Por otra parte, las ONG locales deben presionar a las dos grandes, Human Rights Watch y Amnistía Internacional, a que se pronuncien (ya que muchas ONG locales tienen contactos con ambas). Quizá me equivoco, pero sospecho que si estos abusos provinieran de Álvaro Uribe, José Vivanco ya hubiese reaccionado.

Otra cosa que se puede hacer es pedir ayuda a quienes ya han ayudado a la oposición venezolana a dar la batalla de las ideas. No estaría mal pujar la idea de una carta conjunta de reputados intelectuales y ex líderes políticos de izquierda y derecha.

Carlos Fuentes, Felipe González, Ricardo Lagos, Joaquín Villalobos, Jorge Castañeda, José María Aznar, Genaro Arriagada, Alejandro Toledo, Vicente Fox, Fernando Henrique Cardoso, Lech Walesa,  Fernando Savater, Enrique Krauze, Carlos Alberto Montaner, Sergio Ramírez, Guillermo Cochez, Yoani Sánchez, Václav Havel.

No estaría mal, además, pedirle un pronunciamiento al nuevo premio Nobel, Mario Vargas Llosa.

Quizá pujar la idea de la carta no es tan fácil, pero llamar a Vargas Llosa, que siempre ha sido tan solidario con Globovisión y con la oposición venezolana, no es difícil. Con el premio Nobel, el alcance de su voz se ha expandido considerablemente.

José Miguel Insulza o Lula no se van a pronunciar por sí solos. Pero si la MUD logra convertir estas medidas en un issue internacional guardar silencio no va a ser tan fácil.

¿Fujimorazo?

Lunes, 13 de diciembre de 2010

La reacción hoy contra las reformas a la Ley Resorte y la Ley de Telecomunicaciones fue admirable, tanto en el ámbito nacional como internacional. Creo que desde el arresto de Alvarez Paz no había visto una reacción tan fuerte (aunque la presión debe continuar y ahora manifestarse en la calle).

Pero la reacción al nuevo anuncio de Chávez, de pedir una habilitante por un período entre 6 y 18 meses, debe ser todavía más fuerte. No sólo por parte de los venezolanos, que estamos obligados a alzar la voz y protestar frente a este brutal atropello. También por parte de la comunidad internacional. Brasil, cuyo poder de influencia sobre las decisiones de Chávez sólo es superado por el de Cuba, debe tratar de interceder. José Miguel Insulza debe pronunciarse en contra de la medida. Estados Unidos, Canada y Europa deben jugar duro en términos de presión diplomática para combatir esta ley habilitante y las reformas a las leyes de medios.

Quizá esto es mucho pedir, pero sólo con presion interna y externa Chávez puede ser forzado a retroceder.

Debe recordarse que el famoso “fujimorazo” fue perpetrado en Perú cuando el Congreso le negó a Alberto Fujimori poderes especiales para legislar. Frente a esta negativa Fujimori decidió disolver el Congreso.

Chávez pretende recibir poderes especiales para bypassear la nueva AN hasta casi las elecciones presidenciales de 2012. Considerando que ya de por sí hay un desfase entre la composición de la nueva AN y las preferencias políticas de los venezolanos, lo que separa este abuso del fujimorazo es muy poco.

La verdadera conspiración (actualizada)

Viernes, 10 de diciembre de 2010

El ministro de Defensa de Brasil, Nelson Jobim, percibe a Chávez como una “nueva amenaza” y considera plausible una incursión militar venezolana en un país vecino. También admite la presencia de las FARC en Venezuela, pero dice que admitir esa presencia arruinaría la capacidad de mediación de Brasil.

El poderoso asesor de Lula, Marco Aurelio García, dice que Venezuela confronta “profundos problemas económicos.”

El presidente de México, Felipe Calderón, dice que Hugo Chávez está activo en todas partes, incluyendo México, y pide a Estados Unidos compremeter a Brasil para frenarlo. Añade que México está haciendo lo posible por aislar a Venezuela a través del Grupo de Río.

El presidente de El Salvador, Mauricio Funes, le pide ayuda a Estados Unidos porque siente que el FMLN lo espía y su integridad física está en peligro. A Funes también lo preocupan la colaboración secreta entre Chávez y el FMLN.

El canciller argentino, Jorge Taiana, dice que el gobierno de Cristina Kirchner no aprueba el asalto al sector privado en Venezuela. Después de Perón, dice, Argentina aprendió la lección.

La ministra de Exteriores de España, Trinidad Jiménez, describe a Chávez como “un payaso,” “una bestia,” un ser “que está en otro mundo,” mientras que Zapatero y Moratinos califican a Venezuela de “desastre.”

Y todo esto, hay que recordar, se lo dijeron funcionarios brasileños, mexicanos, salvadoreños, españoles y argentinos a diplomáticos de EEUU. No es que se lo dijeron entre ellos. Se lo dijeron al imperio.

Estados Unidos, pues, no está conspirando para derrocar al gobierno venezolano. Lo que está ocurriendo es que Iberoamérica está conspirando con Estados Unidos para ver cómo controlan a Chávez. Y, si no, chismoseando sobre cómo el bolivariano está destrozando su país.

WikiLeaks y el maletín

Jueves, 9 de diciembre de 2010

Embajada de EEUU en Argentina

Los WikiLeaks relacionados a América Latina se están poniendo más interesantes.

En primer lugar están los cables sobre la situación en El Salvador, resumidos en un interesante reportaje de El País. Al parecer, el presidente Mauricio Funes le ha pedido a Estados Unidos ayuda en el pulso que libra con el partido que lo llevó a la presidencia, el FMLN.

En segundo lugar están los cables enviados por la embajada de Washington en Argentina cuando estalló el escándalo del maletín con los 800 mil dólares. Todavía no tengo muchas cosas claras, pero si no me equivoco esos cables revelan una suerte de operación de damage control del Departamento de Estado norteamericano para que la detención y enjuiciamiento de Kauffmann, Maiónica y Durán (los empresarios que fueron grabados por Antonini en colaboración con el FBI) no afectara la relaciones diplomáticas con Argentina. Al fondo de estos cables transpira incluso cierta irritación con el caso del maletín, como si los diplomáticos de EEUU sintieran que su trabajo en Buenos Aires estuviese siendo saboteado por la instancias judiciales ¡de su mismo país! ¿No se dan cuenta estos jueces y fiscales estúpidos que los Kirchner son extremadamente sensibles y aprovechan cualquier oportunidad para explotar el antiamericanismo con motivaciones políticas? ¿No se dan cuenta que ahora la embajada se verá obligada a tratar de influir periodistas para que entiendan que el poder judicial y el cuerpo diplomático de EEUU son dos cosas distintas, y así, a través de ellos, tratar de convencer a los Kirchner de que el destape de valijagate no es una campaña del gobierno norteamericano en contra de ellos? Aunque quizá exagero un poco, estas preguntas parecen desprenderse de estos cables.

Al mismo tiempo, no se debe descartar la posibilidad de que, simultáneamente, la administración Bush haya presionado al poder judicial para asegurar que se investigara el caso de Antonini. Que se haya dado esta presión es, en mi opinión, perfectamente factible. (Si mal no recuerdo, Hugo Alconada Mon revela en Los secretos de la valija que un alto funcionario estadounidense le hizo entender sin deletreárselo que el gobierno ejerció presión para que se investigara el caso).

Si algo define al antiamericanismo es no comprender las complejas dinámicas de la democracia estadounidense. Es ver al gobierno de EEUU como una entidad monolítica, donde no hay una diversidad de puntos de vistas, intereses, presiones internas y externas, inercias y tradiciones burocráticas moldeando las políticas de gobierno.

De estos sutiles grises y fascinantes complejidades están hechas las buenas novelas.

Somatizando la discordia

Martes, 7 de diciembre de 2010

A veces es difícil saber si el gobierno de Venezuela está politizando la tragedia de las lluvias para ganar votos o si en Chávez y sus subalternos el discurso de guerra, confrontación y satanización de la oposición es cada vez más parte de su naturaleza. Es difícil saber si ese discurso es calculado o sencillamente su manera de comunicarse y relacionarse con el mundo.

Claro que hay manipulación electorera (electoral y politiquera), como lo demuestra este video en el que Chávez manifiesta una excesiva preocupación porque se sepa en televisión que los damnificados están siendo alojados en Miraflores.

Pero con algunas declaraciones el gobierno ha llegado a un extremo donde el cálculo racional y los instintos animales son a veces difíciles de distinguir.

Ayer, por ejemplo, el ex ministro Ramón Rodríguez Chacín, criticó a la Iglesia por no haber hecho nada durante la tragedia -sin que la Iglesia haya hecho una sola crítica al gobierno por el desastre de las lluvias. ¿Qué posible motivación electoral o política puede tener esta declaración? ¿Qué le cuesta al ex ministro ahorrarse este ataque que, si algo, tiene un efecto electoral negativo para el gobierno?

Lo mismo se puede apreciar en otro video. Acorralado por los reclamos de una pobre mujer, el presidente Chávez, sin saber cómo responder, le echa la culpa al latifundio.

Esta no parece ser una respuesta calculada sino un simple reflejo. Así como uno reacciona temblando cuando hace frío, Chávez reacciona a la critica y la adversidad atacando a la oposición y el capitalismo.

Eso sí: cuando puede.